domingo, 13 de diciembre de 2015

Jamás los des por vencidos



¿Cómo calificar la campaña que emprendió Sebastian Vettel junto a Ferrari en este 2015? Pues el alemán y la formación de Maranello no lo tenían nada fácil para esta temporada que hace semanas culminó en Abu Dabi. Vettel venía de un 2014 aciago donde nunca se sintió a gusto con el medio mecánico que tuvo. Fue constantemente superado por Daniel Ricciardo, su compañero de equipo en Red Bull, quien consiguió las 3 victorias de la marca de las bebidas energéticas en 2014.
Vettel necesitaba reinventarse tras haber saboreado las mieles del éxito durante 6 años consecutivos junto a los de Milton Keynes, periodo en el que logró 39 victorias y 4 Campeonatos al hilo. Su fichaje por Ferrari se anunció en el trágico GP de Japón de 2014, y  a principios de diciembre ya había comenzado a trabajar junto al equipo italiano.
Por su parte Ferrari también debía renacer de las cenizas tras la peor temporada de los últimos 16 años, 2 míseros podios y un puñado de puntos conseguidos por Alonso y Raikkönen dejan entrever lo sombría que fue la contienda en 2014, marcada por la gran limpieza en casi todas las áreas que conciernen al equipo con sede en Módena. Para ello la reforma trajo consigo nueva gente al equipo como el Presidente Sergio Marchionne, el nuevo jefe de equipo Maurizio Arrivabene y otros permanecieron como el diseñador James Allison, ahora completamente insertado en el diseño del monoplaza junto a su homólogo Simone Resta.
Vettel (izquierda) y Raikkonen (derecha) además de ser compañeros en Ferrari son grandes amigos
En Australia, primera cita de la temporada, Vettel consiguió el 3er escalón del podio detrás de Hamilton y Rosberg, mientras que su compañero Kimi Raikkönen abandonaba a 15 vueltas del banderazo a causa de un neumático mal colocado. La situación empezaba bien pero lo mejor vendría en la carrera de Malasia. Tras la largada el alemán se fue acercando poco a poco al ritmo de sus rivales de Mercedes para luego asestarles un golpe en el momento justo. Allí Sebastian logró su primer victoria de rojo, cortando para Ferrari una racha sin victorias que se extendía desde Mayo de 2013 cuando Alonso ganó el Gran Premio de su país con la F138, y a su vez el joven de 28 años volvía a ganar tras 21 carreras (la última la había logrado en el  GP de Brasil 2013).
Con el transcurrir de la temporada el alemán de Ferrari fue progresando y logró importantes podios, para luego volver a la senda victoriosa en Hungría y Singapur, cubriendo totalmente los objetivos planteados por el equipo italiano a principios de año. Cabe destacar que también tuvo sus momentos frustrantes, citemos algunos ejemplos, en el Gran Premio de Austria apuntaba a llevarse el tercer lugar pero un percance en la pistola neumática de uno de sus mecánicos le relegó a la cuarta posición dejando el podio al alcance de Felipe Massa con su Williams, además en Bélgica a 2 giros del final revienta el neumático trasero izquierdo, quedando finamente decimotercero y fuera de los puntos, situación que capitalizó Romain Grosjean para alzarse con el Lotus al tercer lugar.
En Monza no pudo encontrar el ritmo suficiente en su Ferrari para quitarle la victoria a Lewis Hamilton pero logró un valioso segundo puesto que contentó a toda la afición ferrarista que cada año concurre a Monza para ver a su equipo en lo alto del podio.
Y lo de Monza lo quiero citar más que nada, puesto que en 2013 Vettel se impuso con el imponente Red Bull RB9 y fue abucheado por la mayoría de los tifosi quienes hubieran preferido una victoria del entonces piloto de la casa roja, Fernando Alonso.
Schumacher estaba en lo cierto cuando tras aquel Gran Premio italiano de 2013 dijo lo siguiente “A Sebastian lo dejarán de abuchear cuando milite en Ferrari”, y otro dato que vale la pena destacar es que Vettel quiere lograr en Ferrari lo mismo que ha logrado su ídolo y mentor Schumacher junto a los de Maranello durante el primer lustro de la década anterior.
El personal de la Scudería Ferrari agrupados en Monza
Ahora tienen un invierno lleno de trabajo para sentar las bases del éxito y ser férreos rivales de Mercedes en 2016, por lo que auguro una temporada donde pueden estar mucho más fuertes que en 2015 pero no debemos subestimar a los otros equipos que también trabajan arduamente por conseguir mejores resultados en la próxima temporada.

Para concluir es bueno recordar que a Ferrari y  Vettel muchos críticos y detractores los daban por derrotados tiempo antes de la contienda de 2015, y finalmente muchos se han tragado sus propias palabras viendo los resultados conseguidos por este alemán que poco a poco va cimentando su nombre entre los grandes de este deporte. Como reza el título “Jamás los des por vencidos” porque cuando menos te lo esperes Ferrari y Vettel aparecerán para conquistarlo todo.